Escalando

miércoles, 6 de abril de 2011

Un reto pendiente

El pasado sábado por fin subí al Peñagolosa, lo tenía pendiente desde el año 2000 en mis inicios de vuelta al senderismo, todavía no recuperada (aunque no sé si me recuperaré del todo, pero yo sigo ahí intentándolo) que desde Villahermosa del río fuimos hasta San Juan y algunos hasta el pico, como yo estaba reventada, me subieron en coche hasta la explanada y Vicentico se bajo conmigo por el bonito bosque de acceso al mismo.
Espolón sur del Penyagolosa, foto desde la cima (fotógrafo Juan)
Ya lo tenía yo pendiente, desde que Juan el año pasado me comentó que me llevaría, ante mi insistencia de que me apetecía subir al Penyagolosa desde Villahermosa del río, él me dijo: subiremos por el espolón sur,  aún estaba en el hospital convaleciente de su accidente el Marzo pasado. Y ahí quedo la idea. Tuve otra oportunidad que por diversas circunstancias al final no fue posible y aunque no he subido desde Villahermosa sí que he subido al pico por una bonita subida, el espolón sur.

Habíamos quedado en casa de Juan sobre las 6:30 que fui a recogerlo y de ahí nos fuimos dirección Vistabella del Maestrazgo, hasta santuario de San Juan de Peñagolosa. Una vez allí intentamos subir hasta la explanada con el coche, pero unos carteles nos indicaron que no estaba permitido, con lo que dimos la vuelta y aparcamos en San Juan. Preparamos el material, y lo repartimos bueno es un decir, yo llevaba mi arnés, dos cintas con mosquetones, el reverso con su mosquetón y el grigri con el suyo, al final optamos por una cuerda de 10.5  y 70 metros,  los gatos, agua y unas barritas. O sea el resto de material lo cargaba Juan, el suyo, equivalente al mío, la cuerda y los empotradores y friends y diferentes cintas elegidos por si acaso. Y emprendimos el camino, si no asustados, sí inquietos pues aunque Juan tiene mucha experiencia en la montaña, en escalada tenemos ambos poca, y yo era la primera vez que no iba a deportiva. Habíamos leído que era fácil pero con unos pocos pasos de IV/IV+, claro que eso es muy relativo porque depende quién lo evalúe. Me imagino que Juan también estaba nervioso porque no sabía como iba a reaccionar yo.
Iniciamos la marcha por el bonito bosque hasta la explanada dónde siguiendo las marcas de la última fuerte subida al pico, al poco nos encontramos una senda a la izquierda hacia arriba que nos encaminaba hasta la canal, para ello había que bajar una pedrera bastante empinada y ahí me asuste un poco, entre los nervios, el viento que empezó a soplar, yo, mi cabecita y la falta de palos, hizo que lo pasara mal y fuera lenta, Juan se escondió para no ponerse nervioso con mis trazas bajando. Una vez encontrado el camino a la altura de la canal fuimos bordeando la gran pared (dónde hay varias vías de escalada pero de mayor nivel que nuestro objetivo) llegamos a la canal (había otra opción un poco más arriba, pero con unos pasos muy delicados y con gran patio y optamos por lo fácil).
Juan en la reunión, del primer largo (yo detrás foto)


Trepamos por la canal hasta el inicio de la pared según la reseña, nos pusimos los arneses, los pies de gato e íbamos a empezar cuando aparecieron dos chavales que iban a lo mismo. Como ya estábamos preparados iniciamos la subida, aunque ellos parecían más hábiles en estas lides.  Evitamos el primer paso (V+ más chungo, ya que el primero no tiene ningún seguro) además así íbamos más rápidos y tuvimos nuestro primer sustillo una piedra que casi golpea a uno de los chicos.

Tuvimos constancia de que había que ir con mucho cuidado, yo estaba un poco más asustada si cabe, o sea que aunque de segunda fui por lo fácil, el lado izquierdo. Ahí te das cuenta que no es lo mismo que la escalada deportiva donde hay más seguros etc... los chicos me animaban, logré soltar el material de la rama y un poco más tranquila, cuidando donde ponía los pies, para no tirar piedras a la otra cordada. Cuando llegué a la primera reunión, tuve que organizarme las cintas, la que llevaba preparada para asegurarme era un poco corta y una vez asegurada, salió Juan a hacer el siguiente largo, visto y no visto ya estaba en la siguiente reunión (aunque no era tal nos permitío estar a la vista en todo momento).

La salida de la primera reunión tiene quizás el siguiente paso de IV y quizás el otro pasico es el de la foto donde se ve a Juan prácticamente de pie, el resto es como de tercer grado eso sí muy aéreo.

Son unos 120 metros.



Así largo tras largo, ya estaba yo empezando a disfrutar y en esas que me dice Juan ya estamos en la cumbre y yo pensé que era para darme ánimos, pero era de verdad, estábamos a unos 20m metros prácticmente al lado de la cumbre. Fue más molesto ir con los gatos que el trozo en sí.....

Y una vez en la cumbre, me había asegurado Juan con la ayuda de un niño, nos hicimos una foto con todo el material y el niño al pie de la torreta del punto geodésico, y luego arriba, cuando tenga las fotos ya las colgaré, yo no llevaba cámara. Dos fotos en la cima: la mía con el móvil para tener constancia 
y una de Juan al lado del vacío mirando al horizonte.
yo en la foto de cima que tengo

Juan mirando hacia el infinito, segunda cumbre

Estuvimos un rato por la cima, subimos arriba, nos hicimos fotos juntos, en la primera y segunda cima, y esperando para ver como les había ido a la otra cordada, pero como tardaban iniciamos la bajada, llegaban cuando abandonabamos la segunda cima, luego los encontramos en San Juan mientras tomábamos una cervecita. 
En la bajada Juan me dijo que habíamos subido bastante bien y que se me veí más fuerte, a ver si en la bajada me comportaba, no estuvo mal, resumiendo: 
Salimos de Geldo 6:45/50 h a.m.
Inciamos el pateo 9:00 h a. m. aprox 
Llegamos al pie de la canal sobre las 11:00 un poco antes más bien a pie de vía
LLegamos a la cima antes de las 12 
Iniciamos la bajada pasadas las 12:30 
Llegamos al coche 14:05
Cómimos en Azaneta del Maestrazgo, (recuerdos de COU....) y
pasadas las 18 horas estaba en Chelva después de haber dejado a Juan.


Más fotos cuando tenga todas.....