Escalando

viernes, 4 de noviembre de 2011

Nepal, vuelta a los Annapurnas

Tengo que hacer una entrada que de alguna forma permita acercar a mis amigos y recordarme en épocas futuras este viaje que acabo de terminar. La realización del mismo se debió a un cúmulo de circunstancias, dado que siempre he sido catalogada por mis amigos como poco viajera. Hablando de puntos como remarcaba Steve Jobs en su discurso en la universidad de Stanford (la noticia de su muerte la daban el día que yo salía de viaje, 6 de Octubre), todo es cuestión de puntos que se conectan y como no podemos conectarlos hacia delante, lo hacemos con posterioridad.
Mi amigo Pepe se fue a Nepal sería el año 2003 ó 2004 y cuando volvió me dijo Lourdes no dejes de ir y no tardes mucho porque está cambiando a unas velocidades, el había perdido 7 u 8 kilos pero se lo veía feliz y de hecho repitió en el 2008, ya con una opción más montañera. En el 2009 mi amigo Juan me propuso hacer la vuelta a los Annapurnas yo en principio no sentía que pudiera ir pero ahí Pepe volvió a insistir y me dijo no pierdas por nada del mundo esa oportunidad. Pero todo se torció, Juan se cayó en Pirineos dos veces la primera se le salió el hombro y la segunda el codo y tuvimos que anularlo. Las cosas han cambiado desde entonces y no sé algo me empujaba hacia ese viaje, pero Juan lo estaba organizando con su novia, bueno el del santuario. Y después de todo lo leído sonaban ecos cerca de mi y me dije porque no me voy yo, tuve un momento de locura y de decidir irme sola, pero al final me dije mejor el organizado, llamé, me apunté y decidí confirmar después de la ruta del camí dels bones homes según como me fuera. Hubo momentos de duda pero al final me lance a la aventura.
Estaba expectante y activa y ya en el aeropuerto me encontre con Amparo, que habíamos hecho juntas las esteles del sur, lo cuál me produjo mucha alegría.
 

Eramos 14, conocía a Amparo y a Amelia de cosas compartidas y volamos hacia Nepal. La impresión de Kathmandú fue incluso más dura que cuando estuve en el Salvador, polvo mucho polvo y todo a medias. Eso si te mueves entre incredula y expectante, Bhaktapur es alucinante limpia y choca de pleno con el resto de Kathmandú. Estuvimos también en la ciudad de los muertos de Kathmandú, Templo Pashupatinath, ya al final del día y también en medio en la estupa de Boudhanath, dónde el ritmo y la sensación de paz impregnaba todo, era como si allí la gente fuera a otra velocidad. Fueron dos días llenos de sensaciones y expectativas por lo que venía y sentía, además de de alimentarnos como si en ello nos fuera la vida. Así llenos de experiencias y más bien sobrealimentados (es interesante ver las fotos de atrás hacia delante) inciamos el treking en autobus hacia Besi Shahar, desde donde iniciariamos la marcha de unas dos horas para nuestra primera noche en un lodge. Pero allí el ritmo es diferente y las 7 horas de autobus pese a que madrugabamos, estabamos a las 6:30 de la mañana listos, se convirtiron en 12 horas entre risas y algún que otro sustillo. 
Dormimos en el primer pueblo, no recuerdo el nombre y ahí ya vimos que no todo iba ser como estaba programdo. Así fueron transcurriendo las jornadas, subiendo en altura poco a poco, durmiendo en pueblecitos llenos de colorido, ya sea en madera en los de menor altitud o en piedra, donde sobre el medio día, nuestra hora de comer empezaba a arreciar el viento hasta el anochecer y ahí entendías lo de las oraciones con las banderitas y los rulos. Una vida dura para los de allí, como es dura para los pueblos pobres, pero que a 3600 metros de altitud tenían su pequeña huerta, eso si muy mayores los veías cargados con grandes fardos de heno. Otra sorpresa grata, es que en esa zona la comunicación era andando y puede que en burro o mula, pero conforme ibamos subiendo estas iban desapareciendo poco a poco, pero aún así el trasiego de gentes que iba de un sitio a otro era impresionante (independientemente de la gente que iba con los trekers), mujeres que iban de visita a otro pueblo, hombres y mujeres que llevabann productos para vender o trasladar a poblaciones de más interior.... era un ir y venir que hacía muy interesante el camino además de que nos permitía utilizar el con sabido Namasté .....
continuaré.......

martes, 4 de octubre de 2011

Actividades del verano

 Este verano he escrito poco o nada ya que he estado muy ocupada andando por ahí, he subido algunos picos y hecho una travesía, el camí dels bons homes. Cada salida ha sido una experiencia en sí misma y resulta arduo y largo contar en detalle estas experiencias por lo que lo resumiré con algunas fotos.

Primeros de Julio una de chicas:




 
Tuc de Mulleres con Teresa y Amparo, primer fin de semana de Julio.
Amparo y yo en el Gran Bachima, la foto nos la hizo Javier 






A mediados de Julio, con Nuria y Paco fuimos hacia el gran Bachimala desde Viadós: Nuria, Paco y Javier subieron pon la Punta del Sabre y Amparo y yo decidimos ir por la normal.
El día era espectacular y además de las fotos de cima he añadido alguna de flores que estaban en su apogeo ...










Todos en la cima del Gran Bachimala
camino hacia Gosol
Para el último fin de semana de Julio (ya prácticamente Agosto nos fuímos al camí dels bons homes desde Berga a Montsegur, subiendo al Pedraforca desde Gosol.





coll de la Porta















de camino a la cima todos..


 Finales de Agosto, reto el Perdiguero desde el Puente de Literola y vuelta a Estós, el 28 de Agosto. La subida interesante un pedregal impresionante desde unos 2700 metros (subimos unos 1650 metros de desnivel) la vuelta fue muy dura nos entretuvimos más de la cuenta subiendo y bajando se hizo muy dura la pedrera tanto de bajada del Perdiguero, como la bajada a Estós, llegamos al refugio a las 10 de la noche, menos mal que nos reservaron la cena.




        En la cima del Perdiguero con Ana y Emili

 Y último fin de semana de entrenamiento en Pirineos, finales de Septiembre con Juan, Miguel, Nando y Nacho mientras ellos hacían las salenques yo acudí con el coche a la cabaña de coronas para recogerlos (ellos hicieron las salenques desde la besurta, hasta el Margalida y desde aquí bajaron al lago/ibón de Llanos) objetivo de mi excursión mientras esperaba que ellos volvieran, como pasadas las 3:30 del medio día no habían llegado al lago volví hacia el coche lentamente por si me pillaban, ellos llegaron más tarde hasta el coche (sobre las 7 de la tarde). Y al día siguiente subimos a la Tuca de Salvaguardia con unas vistas estupendas.... estuvo bastante bien, subí un poco pillada sobre todo al final pero la bajada estuvo muy bien.


Cima de la Tuca del Salvaguardia

Con los chicos en la cima























Con esto he resumido mis subidas a Pirineos de este verano que no ha estado mal, por aquí he hecho otras excursiones clásicas como el Benicadell, la de Benageber de mi pueblo, el forat de Bernia con Nuria, subida al Espada-Rápita desde Alcudia de Veo y vuelta a Alcudia de Veo por el Jinker,...etcc..
y ya veremos si estoy preparada para que la que me espera ...

lunes, 30 de mayo de 2011

Nuevo fin de semana en Pirineos

El pasado fin de semana, coincidiendo con mi cumpleaños decidí pasarlo con un grupo de amigos en Pirineos, el objetivo era el Aneto, objetivo fuera de mi alcance según una gran parte de amigos, las amigas confiaban más en mí, porque comparada con ellas quizás esté fuerte y con ellos no.
Bueno objetivo no conseguido, por decisión propia y del calor y cansancio y esa vena hedonista que que de vez en cuando me sale, eso me pasa con muchos libros, me leo el final y así puedo disfrutar del resto del libro si no a veces leo tan rápido que no disfruto. Me ha pasado una cosa curiosa, he vuelto a releer todos los libros de Fred Vargas (ella los escribe en sus días de vacaciones, yo los leo en una tarde) y me he dado cuenta de que me había perdido muchas cosas y en algunos incluso no recordaba el final, igual al año que viene repito ....
A lo que íbamos, estaba asustada por lo que había leído, escuchado y ciertas caras de estupefacción cuando dije que igual me iba al Aneto, en cambio estoy rodeada de gente que ha ido dos veces a pirineos y una de ellas al Aneto entonces me debatía entre la sorpresa y el susto. Al final la semana se complicó, viaje a Madrid miércoles, lo cuál rompe el ritmo, final de curso viernes (algo tenso este año, aunque al final bastante bien) y preparados listos ya, salimos sobre las tres de la tarde rumbo a Benasque.
Compré unas tortitas para celebrar el cumple y la duda estaba en como subirlas al refugio si que llegarán hechas migas (objetivo conseguido).
Al final llegamos a las 10 a la Besurta (dónde se dejan los coches, esto es para los no iniciados claro), cargamos las mochilas, con las tortas entre el tubo de la mochila y la tapa y para arriba.... llevábamos unos 15' andando y vi que no tenía luz, descargue, me fui al coche con el frontal de Raúl y pillé pilas y como soy algo supersticiosa ya pensé mal empezamos. Cenamos y a dormir, dejé mochila preparada, me levanté a las 5 desayuné, y a las 6 estaba preparada, entre unas cosas y otras salimos a las 6:30 el ritmo al principio bien pero al final me fui quedando atrás, cansada, mi ritmo es otro lo que sea y mi falta de práctica ...bueno chachano seguí hasta que ya vi un nevero un poquito más hielo y decidí ponerme los crampones y seguir en un rato que me encontré a Paco y a Emili un poco antes de la última pendiente del collado dónde se coge el Portillón, pero cuando llegué ahí habían desaparecido. Pregunté y me dijeron que para arriba, y fui para arriba, volvía a preguntar y me dijeron que ese camino llevaba a las Maladetas, para abajo, cogí el sendero hasta un punto con unas piedras la huella subía para arriba y la seguí, hasta llegar al pluviómetro, pero allí no encontraba ningún punto accesible, y la gente había desaparecido hasta que volví a preguntar y ya me indicaron el camino.
En el Portillón de entrada no me apetecía nada bajar, pero en ese momento vinieron unos chavales de Mora de Rubielos y les pedí ayuda y baje con ellos, paramos en las primeras piedras comí algo, estaba desmayada y uno de los chavales se ajusto el crampón y siguieron yo decidí ir a mi ritmo hasta donde me apeteciera, el paisaje era impresionante y abrumador, esa sensación de vacío y de sentirse nada, si eso es así aquí como debe ser en los Alpes o en el Himalaya.... y disfruté me sentía más que cansada un poco cardíaca pero me dije: va voy a seguir hasta al menos 3000 metros (en mi altimetro) y seguí pero el calor era insoportable y me paraba en cada piedra casi y cuando llegué me paré y descansé hasta que alguien del grupo este de vuelta (se lo había comentado a los chavales)..... pero era tanto el calor que no pensé si vuelvo al Portillón ahí parece que hay algo de sombra  y decidí volver. En el camino de vuelta me encontré a gente con pinta si no más, al menos tan agotada como yo pero ellos seguían yo no, Por qué? he ahí la pregunta
Mi decisión en ese momento fue porque me dije a mi misma, hasta aquí he disfrutado, el paisaje es espectacular, el día magnífico, auqneu con mucho calor, a partir de ahí podía seguir pero bajar para mí iba a ser un suplicio (estuve en el glaciar del Aneto una hora y media más o menos) y decidí es mi cumpleaños y he venido a disfrutar.... y sea sincronismo o qué ayer tenía un mensaje en mi blog (el otro) en un entrada que me encanta y que resumo en esta frase:

Lo que nos conviene puede ser reconocido por dos características: crecimiento y alegría. Un crecimiento que no conduce a la alegría puede ocultar la imposición de un territorio que no es el nuestro. Una alegría que no produce crecimiento puede estar larvada de triste resentimiento.
                                                                           El deseo según Gilles Delouze, Maite Larrauri/Max
Y esto se puede aplicar, a quien amamos, a las personas que nos encontramos en el camino, a las aficiones y como no a la montaña. 
Juan me ha dicho que  por qué no me conformo con hacer excursiones, bonitas por el Pirineo si no tengo energía para subir al Pico que lo podría pasar igual de bien, pero la respuestas es porque conformarse cuando se puede alcanzar la luna, marte, saturno, urano,.... si me hubiera conformado, si hubiera hecho caso a todos los que me han dicho alguna vez en la vida: dejaló que tu no vales, no puedes o algo equivalente,  nunca hubiera salido de mi pueblo, nunca hubiera estudiado, nunca hubiera aprendido todo lo que he aprendido y no estaría trabajando donde estoy trabajando y no podría vivir la vida que llevo, que es la vida que he elegido. 
En estos momentos de mi vida, me siento plena,  he conseguido tener unas aficiones que me permiten crecer y me dan alegría de vivir, la montaña, el cine, la lectura y los amigos, unos amigos y amigas que son lo mejor y con los que disfruto de una charraeta, de una salida en grupo, un paseito por la montaña, los libros y las películas que compartimos  y  estoy rodeada de gente que me quiere, me estima y me valora. Además, no sé si es privilegio de la edad, del trabajo realizado hasta ahora  y por supuesto de esa componente de suerte que esta ahí si uno la busca, pero casi me siento libre y aprendo día a día cosas nuevas y eso para mí es fundamental, el día que deje de aprender ........ y visto y confronto la vida con ese hedonismo tan vital .... me viene al quite una conversación con una compañera que evaluando mi vestimenta me dijo:
Lourdes no sé si eres consciente de como vas vestida o es que no te importa, me quedé un poco sorprendida pero en ese momento se me ilumino la cara con una sonrisa y le dije gracias ¡ES VERDAD NO ME IMPORTA! y me sentí libre  
Las fotos, no he hecho muchas me sentía abrumada y emocionada por el paisaje...
Además, para completar la crónica tengo que darle las gracias a Jesús un Zaragozano que me encontré en el camino (me dijo que subía todos los años al Aneto) con su conversación y compañía baje hasta el final de la nieve bastante cómoda y bien, ya en la piedras apareció Juan un poco abrumado no sé que le daba más miedo que hubiera subido o que no, creo que en el fondo tenía miedo que subiera (por mí claro) y bajé con él las piedras ya casi al final se unió Juanjo (uno del grupo nuestro) y nos tomamos cervecitas y acuarios los tres.... al sol...
Al día siguiente
Al día siguiente paseito hasta Aiguallús y luego hasta un lago que conecta con el valle de Aran ...relajadito y para estirar las piernas, eso si reventada por las botas y el cansancio del día anterior ...




Almorzando en el lago

En el lago, al fondo el valle de Aran
 
Mi amigo Pepe cuando le conté la experiencia me dijo: cuanto me alegro que subieras hasta el glaciar y que hayas llegado hasta ahí...... y pensar que todo empezó en aquella subida al Puigcampana con los chicos: José Luis, Pepe, Isidro, Juan Luis, Fernando y Carolina..... he buceado, subido montañas, he escalado....cosas que no me atreví ni pensar antes..... y por supuesto escribo y llevo dos blogs ... cada vez más confundibles entre sí, si no fuera por las fotos.....
 REVISANDO ME HE ACORDADO DEL SIGUIENTE POEMA
 Seré siempre un ideal e indigno amante
de los largos viajes y los azules mares,
y moriré una tarde, como todas las tardes,
sin rasgar la turbia línea de los horizontes.
Hacia Madrás, Singapur, Argelia y Sfax
partirán como siempre orgullosos los barcos
y yo, inclinado en un despacho ante mapas naúticos
haré sumas en gruesos libros de contabilidad.
Dejaré ya de hablar de lejanos viajes,
mis amigos creerán que ya los he olvidado
y mi madre contenta dirá a quien pregunte:
"Fue un capricho juvenil, pero ahora ya ha pasado ...."
Pero mi propio yo una tarde ante mí se alzará
y una razón, como juez despiadado, me pedirá
y esta mano mía indigna que tiembla se armará, señalará y sin miedo golpeará al culpable.
Y yo que tanto deseé ser enterrado un día
en algún mar profundo de las lejana Indias,
tendré una muerte común y muy triste
y un entierro como los entierros de muchos hombres.


                Nikos Kavadias
 
No quiero que a mí me pase lo mismo .........

miércoles, 6 de abril de 2011

Un reto pendiente

El pasado sábado por fin subí al Peñagolosa, lo tenía pendiente desde el año 2000 en mis inicios de vuelta al senderismo, todavía no recuperada (aunque no sé si me recuperaré del todo, pero yo sigo ahí intentándolo) que desde Villahermosa del río fuimos hasta San Juan y algunos hasta el pico, como yo estaba reventada, me subieron en coche hasta la explanada y Vicentico se bajo conmigo por el bonito bosque de acceso al mismo.
Espolón sur del Penyagolosa, foto desde la cima (fotógrafo Juan)
Ya lo tenía yo pendiente, desde que Juan el año pasado me comentó que me llevaría, ante mi insistencia de que me apetecía subir al Penyagolosa desde Villahermosa del río, él me dijo: subiremos por el espolón sur,  aún estaba en el hospital convaleciente de su accidente el Marzo pasado. Y ahí quedo la idea. Tuve otra oportunidad que por diversas circunstancias al final no fue posible y aunque no he subido desde Villahermosa sí que he subido al pico por una bonita subida, el espolón sur.

Habíamos quedado en casa de Juan sobre las 6:30 que fui a recogerlo y de ahí nos fuimos dirección Vistabella del Maestrazgo, hasta santuario de San Juan de Peñagolosa. Una vez allí intentamos subir hasta la explanada con el coche, pero unos carteles nos indicaron que no estaba permitido, con lo que dimos la vuelta y aparcamos en San Juan. Preparamos el material, y lo repartimos bueno es un decir, yo llevaba mi arnés, dos cintas con mosquetones, el reverso con su mosquetón y el grigri con el suyo, al final optamos por una cuerda de 10.5  y 70 metros,  los gatos, agua y unas barritas. O sea el resto de material lo cargaba Juan, el suyo, equivalente al mío, la cuerda y los empotradores y friends y diferentes cintas elegidos por si acaso. Y emprendimos el camino, si no asustados, sí inquietos pues aunque Juan tiene mucha experiencia en la montaña, en escalada tenemos ambos poca, y yo era la primera vez que no iba a deportiva. Habíamos leído que era fácil pero con unos pocos pasos de IV/IV+, claro que eso es muy relativo porque depende quién lo evalúe. Me imagino que Juan también estaba nervioso porque no sabía como iba a reaccionar yo.
Iniciamos la marcha por el bonito bosque hasta la explanada dónde siguiendo las marcas de la última fuerte subida al pico, al poco nos encontramos una senda a la izquierda hacia arriba que nos encaminaba hasta la canal, para ello había que bajar una pedrera bastante empinada y ahí me asuste un poco, entre los nervios, el viento que empezó a soplar, yo, mi cabecita y la falta de palos, hizo que lo pasara mal y fuera lenta, Juan se escondió para no ponerse nervioso con mis trazas bajando. Una vez encontrado el camino a la altura de la canal fuimos bordeando la gran pared (dónde hay varias vías de escalada pero de mayor nivel que nuestro objetivo) llegamos a la canal (había otra opción un poco más arriba, pero con unos pasos muy delicados y con gran patio y optamos por lo fácil).
Juan en la reunión, del primer largo (yo detrás foto)


Trepamos por la canal hasta el inicio de la pared según la reseña, nos pusimos los arneses, los pies de gato e íbamos a empezar cuando aparecieron dos chavales que iban a lo mismo. Como ya estábamos preparados iniciamos la subida, aunque ellos parecían más hábiles en estas lides.  Evitamos el primer paso (V+ más chungo, ya que el primero no tiene ningún seguro) además así íbamos más rápidos y tuvimos nuestro primer sustillo una piedra que casi golpea a uno de los chicos.

Tuvimos constancia de que había que ir con mucho cuidado, yo estaba un poco más asustada si cabe, o sea que aunque de segunda fui por lo fácil, el lado izquierdo. Ahí te das cuenta que no es lo mismo que la escalada deportiva donde hay más seguros etc... los chicos me animaban, logré soltar el material de la rama y un poco más tranquila, cuidando donde ponía los pies, para no tirar piedras a la otra cordada. Cuando llegué a la primera reunión, tuve que organizarme las cintas, la que llevaba preparada para asegurarme era un poco corta y una vez asegurada, salió Juan a hacer el siguiente largo, visto y no visto ya estaba en la siguiente reunión (aunque no era tal nos permitío estar a la vista en todo momento).

La salida de la primera reunión tiene quizás el siguiente paso de IV y quizás el otro pasico es el de la foto donde se ve a Juan prácticamente de pie, el resto es como de tercer grado eso sí muy aéreo.

Son unos 120 metros.



Así largo tras largo, ya estaba yo empezando a disfrutar y en esas que me dice Juan ya estamos en la cumbre y yo pensé que era para darme ánimos, pero era de verdad, estábamos a unos 20m metros prácticmente al lado de la cumbre. Fue más molesto ir con los gatos que el trozo en sí.....

Y una vez en la cumbre, me había asegurado Juan con la ayuda de un niño, nos hicimos una foto con todo el material y el niño al pie de la torreta del punto geodésico, y luego arriba, cuando tenga las fotos ya las colgaré, yo no llevaba cámara. Dos fotos en la cima: la mía con el móvil para tener constancia 
y una de Juan al lado del vacío mirando al horizonte.
yo en la foto de cima que tengo

Juan mirando hacia el infinito, segunda cumbre

Estuvimos un rato por la cima, subimos arriba, nos hicimos fotos juntos, en la primera y segunda cima, y esperando para ver como les había ido a la otra cordada, pero como tardaban iniciamos la bajada, llegaban cuando abandonabamos la segunda cima, luego los encontramos en San Juan mientras tomábamos una cervecita. 
En la bajada Juan me dijo que habíamos subido bastante bien y que se me veí más fuerte, a ver si en la bajada me comportaba, no estuvo mal, resumiendo: 
Salimos de Geldo 6:45/50 h a.m.
Inciamos el pateo 9:00 h a. m. aprox 
Llegamos al pie de la canal sobre las 11:00 un poco antes más bien a pie de vía
LLegamos a la cima antes de las 12 
Iniciamos la bajada pasadas las 12:30 
Llegamos al coche 14:05
Cómimos en Azaneta del Maestrazgo, (recuerdos de COU....) y
pasadas las 18 horas estaba en Chelva después de haber dejado a Juan.


Más fotos cuando tenga todas.....

jueves, 10 de marzo de 2011

¿Qué pesa cuando subes una montaña? Reflexiones de una aprendiza

Hay muchas formas de abordar la subida a una montaña, una caminta por la montaña o el monte, una cresta etc. Depende de la experiencia y de la inexperiencia del sujeto o sujeta. Partiendo de que mi experiencia es muy limitada, aunque he adquirido alguna cuando empecé en esto de salir con los amigos al monte hacia muchos años que hacia muy poco deporte, salvo nadar una o dos veces por semana más o menos regularmente. Por supuesto qué he nacido en un pueblo del interior y por ello el paisaje me es familiar y también los miedos ancestrales de mis padres, sobre todo los de mi madre, si nevaba si había que saltar cequias (ya se que se dice acequias pero en mi pueblo no). Aún recuerdo el día, tendría unos 11 años, que como siempre en Pascua nos íbamos al monte a merendar, mis amigos sobre todo los chicos tendrían 14 ó 15 y lo que pasa basta que yo dijera que mi madre me había prohibido saltar cequias, que a saltar cequias y yo a dar la vuelta cuando llegaba al sitio, volvían a saltar y yo apunto de llorar. En una de aquellas, la cequia era pequeña y me dispuse a superar todos mis miedos y a saltarla, y ese mismo momento alguien me llama para decirme que más adelante hay un paso y yo caigo dentro de la misma. Entonces no pude más y lloré, por la vergüenza, por el miedo al castigo de mi madre y por esa torpeza tan innata  en mí que me habían grabado a fuego. Hasta que mis amigos se metieron todos a la cequia para que yo dejará de llorar......

paisaje nublado Chelva
Pese a todo, ande, corrí y subí los montes de mi pueblo pero sobre todo me dediqué a entrenar mi mente en otros menesteres que me gustaban más y los pensé más útiles. Pasados los años una amiga, Irene me invitó a una excursión hacia bastante tiempo que no había salido (aunque siempre he hecho alguna, en Asturias bastantes, pero turisticas) pero diríamos que esa despertó mi gusanillo, no sabíamos si íbamos a dar un paseo o qué y ese paseo se convirtió en un barranco, donde había que subir piedras, trepar, destrepar, e incluso mojarnos, llegue a casa con los pantalones hechos trizas y las piernas llenas de arañazos y eso que me bloquee en una ocasión pero decidí repetir. Igual hacíamos 3 ó 4 al año pero ahí estaba yo, siempre la última pero ahí, me acuerdo que Mikel siempre se quedaba conmigo, menos cuando venía JC  que siempre me decía que yo no servía para esto. Pero un buen día,  con Pp y los amigos empezamos a hacer cosillas  ya iba mejor (también había logrado estabilizar mi tiroides), el reto fue el Puigcampana, que día tan espectacular, estábamos por encima de las nubes, logré hacerlo en 3:30 subir que no estuvo nada mal, ahí JL me ayudo mucho y F, el pobre me dijo que le había engañado....    y el gusanillo creció en intensidad.
subiendo al Puigcampana Feb 2004

Hice el curso de escalada y así empecé a salir con más asiduidad, hasta que empecé con los grupos que se forman por la RED conocí nuevos amigos y los retos fueron subiendo, llegué a ir a Pirineos ha hacer dos paseitos, uno con raquetas que me pasé todo el rato cayéndome y hundiéndome en la nieve y me lancé a un reto quizás exagerado pero quería ver que pasaba y me fui con un gente que iba a subir al Aneto, yo estrenaba material (ligero por lo del peso de la mochila) y a mi medida, por supuesto no puede aguntar el ritmo, nieve, raquetas por segunda vez...y la niebla pudo el miedo con mis piernas y el corazón...me encontré con una gente que venía de bajada y que me recogió, mis compis les habían dejado el recado, y la experiencia quedó ahí.
agulles mayo 2009

lago helado finales mayo 2010
Pero seguí saliendo, por aquí, hice la ruta de las estrellas, y me apunte a una subida al Posets y otra al Monte Perdido para volverme a poner a prueba, primero fue el M. Perdido el día no era bueno, pero como lo has contratado parece que hay que subir y el miedo apareció, no dormí en toda la noche otra vez los fantasmas, soné con niños rotos en el monte y esto me tuvo paralizada toda la subida;

 
En el Posets me picaron entre 150 y 200 mosquitos o tábanos subiendi al refugio del Angel Orús, aún así llegué a 3200 metros pero sola y hubo un momento en que decidí que no seguía, por qué? mis miedos otra vez a la bajada sobre todo la canal?, (de hecho me volví casi llorando..) y eso que había gente que iba media hora o más detrás de mí.
 Finalmente, decidí hacer con un grupo de amigos una travesia por Pirineos quizás la más espectacular o una de las más espectaculares Torla-Bujaruelo-Brecha-Goriz-M.Pérdido-Torla y como la había organizado yo los miedos los tuve hasta cierto punto bajo control. Pero cuando llegué a Sarradets no pude más y afloraron todos de golpe, no fuí consciente pero estuve un día sin salir del cemento sobre el que se asienta el refugio, fuí incapaz de pisar ni por un segundo fuera. Mis amigos se dieron varias vueltas y yo me refugie en la lectura. Al día siguiente había que salir y salí........

En sarradets 1 de agosto 2011

Todo esto por qué? simplemente porque ayer con Ma estuve charlando sobre el peso de mi mochila y empiezo a estar un poco harta, porque lo mismo me dijo R y empieza ser la comidilla..... Mi mochila puede que pesé sí, pero la suelo adaptar a la ocasión, no es lo mismo un paseo aunque sea largo que una ascensión, pero tengo un listado de que cosas son imprescindibles para llevar en una mochila: he hecho varios cursos. Puede que yo llevé mucha agua, pero yo sudo mucho y necesito agua.

bajando del castillo d'acher Octubre 2010
Además,  lo he leído y me lo ha comentado mucha gente que hace bastante montaña, lo normal es hacer unos 300 metros de desnivel, por supuesto no para cracks ni grandes alpinistas entrenados (andando con nieve, terreno de dificultad...), y yo estoy en los rangos.  Otra cuestión importante es que se debe empezar despacio, lo que no hay que hacer es parar mucho rato, porque se enfrían los músculos. Además, la pericia para andar en dicho terreno hace que avances mucho y yo ahí sigo aprendiendo.

Si que tienen razón en que yo suelo llevar mucho peso, pero no en la mochila si no con mis miedos ya que la única forma de superarlos es enfrentarlos y en ello sigo,  creo que lo estoy haciendo bien (Yo antes soñaba con precipicios, alturas de impresión, senderos estrechos, paisajes alucinantes y miedo a caer, hace tiempo que no tengo ese tipo de sueños), lo importante no son las cimas que subes, si no como vives el camino y yo sigo aprendiendo que es como he elegido vivir

martes, 22 de febrero de 2011

Salida del SAM - GMP




Este último fin de semana me he ido a Pirineos con el SAM, hicieron una salida de iniciación, el objetivo era subir al Bisaurin. Yo me apunte aunque emocionada y un poco asustada, porque después de tres semanas de resfriado no sabría como me iba a comportar, teniendo en cuneta que ya de por sí soy lenta.
De esta salida he aprendido varias cosas, primero que todavía no soy lo suficientemente fuerte como para ir o adaptarme al ritmo de otra gente y segundo cada vez soy más consciente que para vencer el miedo yo necesito mucha práctica. Además como más disfruto de las actividades es cuando yo controlo, esto es cuando puedo depender de mi misma, aunque en un momento determinado pueda pedir ayuda.


Llegamos relativamente temprano al refugio, tal que aún estaban en la reunión, ahí decidieron hacer tres grupos, primero los más fuertes para ir abriendo huella, luego los que tenían ligeras nociones y posteriormente los más torpes
Fue atropellada mi decisión de ir con los últimos, pero como tampoco sabía a donde iba no tenía control sobre la situación, pues aunque tenía conocimientos me falta práctica y soy lenta.

 Tenía que haber salido a la misma hora que los fuertes y yo a mi ritmo, estos me servirían de guía y el resto de grupos me irían alcanzando, así cuando se produjeran las primeras dificultades ya estaría con el resto de grupos.

Tuve esa sensación pero no me atreví, para mí una salida en invierno y con el tiempo que hacia era una novedad. Qué pasó? que cuando llegue al collado estaba cansada, más psicológicamente que físicamente aunque también.
 YO que vi la rampa de subida de unos 500 metros de desnivel aunque no muy inclinada y me acordé de lo que me había contado Juan, aparecieron todos mis miedos y los dolores de las piernas se incrementaron y sólo de pensar por donde tenía que bajar y el tiempo que nos había costado llegar hasta ahí... decidí que sería en otra ocasión y que necesito entrenar y salir más.
De todas formas fue una experiencia, el encontrarme con mis miedos, el descubrir que cada vez tengo más herramientas para sobre llevarlos y que estaba preparada.

Al poco, al menos una hora después o así oí como Luis C. me llamaba a ver si estaba bien, e intente tranquilizarle y al cabo unos 15' más o menos aparecieron los del grupo más rezagado que habían decidido darse la vuelta, me imagino que en parte por mi deserción, lo siento pero pensé que era lo más sensato por el resto del grupo.

Yo tengo que reconocer que iba preparada para la situación, creo que era de las veces que mejor llevaba la mochila y el peso era el adecuado.

Luego pasamos el rato, aprendiendo a bajar pendientes de nieve, la autodentención y yo haciendo fotos como una descosida, sobre todo las que más echaré de menos son las del collado, claro que no me dí cuenta que no llevaba la tarjeta hasta que estuve abajo.
Esperamos al resto, que si que había hecho cima, y ya bajamos con todos. Juan y yo recogimos nuestra comida y comimos con el grupo en el refugio, dónde estuvimos aprendiendo a encordarnos para avanzar en ensamble o de glaciar y después hicimos una pequeña partida de truc, que no había jugado desde los tiempos de físicas. Jugamos Luis C., Gabriel y Nando  la verdad es que la partida fue estupenda. Cenamos con el grupo, la cena del refugio y al día siguiente teníamos previstas diferentes alternativas.

 La dormida en el coche fue un poco rara, pues parece ser que intentaron abrirnos el coche, pero la verdad es que dormí muy bien y eso que hacia frío y mucho aire. Tanto que a la mañana siguiente decidieron ir hacia el refugio de los forestales, la ruta hacia la cara norte del Bisaurin.





Pese al aire hizo un día estupendo y aunque subimos con frío por la umbría cuando ya llegamos al sol el día estaba espectacular y el aire parecía más calmado. Vimos dónde había caído el alud dos días antes y disfrutamos mucho de las vistas de las fotos y por supuesto de la vuelta. Lo disfrute mucho ......


Foto de grupo en el refugio de los forestales de Gabriel

Nueva visita a Pirineos

Rompí con la racha comenzada en Mayo hasta Noviembre en la que al menos una vez al mes acudí a Pirineos. Pero en Febrero he intentando compensar y he ido de momento dos fines de semana: el fin de semana del 11-12-12 y el  18-19-20.



El primero organizado por Nuria y Paco con un grupo de amigos, la idea era hacer una excursión con raquetas sencillitas, anime a Manoli, ya que tenía el fin de semana libre y se vino con nosotros.


La excursión fue relativamente fácil, el sábado fuimos hacia la cola de caballo por el parque de Ordesa, dejamos los coches en el parking, ya nevado y empezamos la caminata a los 10' tuvimos que recurrir a crampones, menos mal que los llevaba por indicación de Manoli y de Juan el resto del grupo se tuvo que poner las raquetas porque el hielo hacia difícil continuar. Fue un paseito muy agradable visitamos y fotografiamos casi, si no todas las cascadas.







Así "chanochano...." llegamos arriba cerca ya de la cascada, dónde apetecía llegar para que nos diera un poquito el sol. comimos en la cascada y luego ya de vuelta hacia casa,  bueno al hotel nos hicimos unas cervecitas en Broto y yo una anchoita que estaba deliciosa. Cenamos en el hotel y a dormir, al día siguiente teníamos excursión por Bujaruelo, fue una pasada volver a ver los paisajes descubiertos este verano, pero ahora nevados. Nos costó bastante llegar con el coche al refugio estaba muy embarrado y ya allí hicimos un paseíto hasta el valle de Otal precioso. Daban tormentas por lo que decidimos no salirnos de la pista. 
Una paradita para tomar algo, ya en el valle, las fotos me salieron un poco sobre expuestas del color de la nieve.



Ya de vuelta nos cambiamos de ropa y picamos/comimos en la terraza del refugio, cerrado en invierno a no ser que se reserve con antelación.
Por lo menos quité el gusanillo, practiqué con crampones lo que reduce el riesgo de pegarme de un pie a otro y un poco con las raquetas más por animo de practicar que por necesidad.
Las botas bien, pero por debajo de los 1500metros suelen hacer daño, tanto en una excursión como en la otra, por lo demás bien a seguir practicando. El segundo día cambié el calcetín y también me hizo daño, estos eran aún más calientes, eso me empujo a comprarme los calcetines anti-calentamiento.